Se celebra el Día Internacional del mal de Amores: ¿por qué?

Hoy es el Día del Mal de amores. Y si hay algo que duele es el amor no correspondido. 

Muchas veces, cuando conocemos a alguien aparece una ilusión inicial de complementariedad, flashás que el otro encaja tal cual con lo que deseás. Esa idealización nos genera dopamina y oxitocina, dos hormonas que tienen cualidades adictivas sobre nosotros. Y a veces nos obsesionamos con la idea de que esa persona es para nosotros aún cuando ni siquiera es recíproco.  

Le decís de meter un plan pero nunca puede o te dice después te aviso y después, nunca te avisa nada. Te cancela a último momento. Te clava el visto o te responde cada mil horas. Toda la iniciativa siempre la tomás vos, obvio. Pero vos te seguís preguntando: ¿es para mí o no es para mí? Amigui, date cuenta: no le interesás. Todos sabemos que no hay falta de tiempo, hay falta de interés.   

Pero, ¿por qué insistís? ¿Por qué rogás? ¿Por qué querés estar con alguien que sabés que no te quiere? Detrás de tus expectativas puede haber muchos factores como la falta de amor propio, baja autoestima o creencias limitantes. 

La peor parte es cuando nos damos cuenta que nos está rechazando y nos preguntamos: ¿por qué no le gusto? ¿No soy suficiente para que me ame así? Nunca te disculpes por ser vos mismo. Jamás debemos inmolar nuestra personalidad para gustarle a alguien. Merecés ser amado tal cual sos sin andar complaciendo a tu entorno.  

Pero por suerte aparecen nuestros amigos diciéndonos “salí de ahí, maravilla”. ¿Cómo? Por ejemplo, haciéndote estas preguntas: ¿realmente conozco a esta persona o es sólo un ideal en mi cabeza? ¿Los actos de esta persona me están dando lugar para que yo proyecte una relación de pareja? ¿Tengo claro si es sólo un vínculo sexual o una potencial relación? ¿Puse a la persona en un pedestal y entonces yo estoy abajo? ¿Me creo menos? 

Coincidir es algo que tienen que sentir ambas personas. No podés obligar a alguien a que te quiera. Esa energía que estás poniendo ahí, mejor invertila en vos, en algo que te apasione hacer. Y acordate que el amor hace bien, te potencia. Pero primero tenemos que arrancar por nosotros mismos. 

¿Viste? Ahora lo sabés.

Temas